viernes, 3 de febrero de 2017

Los guardianes de la mesa redonda…

Había pasado mucho tiempo desde aquella última vez, personalmente sentía que les echaba de menos, eran las seis o seis treinta de la tarde, sonaba mi teléfono, era Juan diciéndome que bajara a su casa , estaba preparando una reunión con amigos, allá estaba Jhoany y una muchacha muy buena gente llamada Lorena, al rato llegaba yo, saludé  a todos los presentes y me alegré de verdad de verles, no veía a Juan me preguntaba dónde andaba, de pronto subía las escaleras con una enorme provisión de cervezas, lo vi feliz,  nos contaba a todos que había buscado cierta marca como de costumbre , pero que igual había encontrado otra importada de Alemania , departimos en una cálida atmosfera de compañerismo, me presentaron a la chica de la cual les hablaba  en un principio, Lorena, se destacaba sobre todo, por su actitud muy positiva y agradable, hubo varios temas : historia mundial, anécdotas personales de cuando se le colma la paciencia a uno, recordamos la experiencia paranormal de juan y la bruja de la “machonta ” (un lugar en Villa María, en ese entonces de matorrales o algo así…) de fondo en el computador portátil se reproducían temas musicales inolvidables que marcaron muchas generaciones, Caifanes,  Ekimosis, héroes del silencio, Kraken, entre otros.

Mientras seguíamos charlando, Jhoany me decía que si lo acompañaba por su prima Angela, fuimos por ella, estaba por el colegio Gerardo Arias, volvíamos, ella nos contaba acerca de un accidente que tuvo en una motocicleta, sufrió varias lesiones, una cortadura en una mano, un raspón en uno de sus pies, además de  un fuerte  dolor de cabeza, decía que todo pasó muy rápido y que menos mal no había ocurrido algo más grave. Pude darme cuenta de su gran carisma.
Nos aproximábamos cada vez más a la casa, instintivamente supimos como un sujeto gamboso de muy mal aspecto (honestamente), nos observaba sin perder detalle alguno, entramos luego en modo alerta acelerando el paso, era obvio que se proponía algo el tipo, pues comenzó a silbarle a sus compinches, comunicándoles el temible mensaje del asalto, lo bueno fue que desaparecíamos de su vista dos pasos adelante, y pensar que Jhoany antes de salir dijo: - esto por acá es muy sano, nunca pasa nada-
ciertamente eso sucede en cualquier parte jej

Quedaron muy buenos recuerdos para la posteridad.







2 comentarios:

  1. Qué buena imagen pedacete!!!
    Os escribía, amigo, para que supierais que ya se pueden dejar comentarios en vuestras entradas. He modificado las opciones de blog necesarias para que ello sea posible. Si quizás alcanzaras a notar comentarios desfavorables o inadecuados, podéis agregar la opción de moderarlos, ya depende de vuestro criterio.

    Un saludo y un gran abrazo. Seguiré muy pendiente del chuzo! XD

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    Respuestas
    1. Amigo! Muchas gracias por vuestro comentario, pienso que es importante atesorar historias que luego seran una ventana al pasado... Un cordial saludo pues y sigue adelante con el genial proyecto de la novela. Estare muy atento a cualquier novedad... un abrazo, que pases un dia extraordinario.

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